Nuevos detalles del asesinato de "la Diabla": Se calentó la vuelta, se escuchó

El caso de Zaida Andrea Sánchez, más conocida como "la Diabla", ha conmocionado a la opinión pública desde principios de 2025. En enero, Sánchez fue asesinada en Medellín, un crimen que, según las investigaciones, fue ejecutado por dos hermanos venezolanos, José Gregorio y Estarlin Oswaldo Morgado Herrera, quienes viajaron desde Venezuela a Medellín y luego se escondieron en Barranquilla.

Planificación meticulosa

Según la reconstrucción de los hechos por parte de los investigadores, Estarlin Oswaldo monitoreó la ejecución del homicidio desde un local comercial en la comuna del Estadio, mientras que José Gregorio conducía la motocicleta que llevó al sicario al lugar del crimen.

Ejecución sin intercambio de palabras

El sicario, sin mediar palabra, disparó varias veces a Sánchez, quien inspeccionaba un daño en su vehículo. Un testigo clave describe que el asesino, con un teléfono en una mano y el arma en la otra, huyó rápidamente del lugar en la misma motocicleta que poco después fue encontrada abandonada a corta distancia de la escena del crimen.

Intento de encubrimiento

Los perpetradores cambiaron de ropa y se mezclaron entre la gente como si nada hubiera ocurrido. Sin embargo, las autoridades lograron identificar y arrestarlos el 12 de febrero en Barranquilla gracias a evidencia y testimonios recogidos.

Confesión y testimonio protegido

Durante las investigaciones, los hermanos Morgado Herrera confesaron a un conocido que "se les había calentado la vuelta" tras el homicidio y que necesitaban huir de Medellín, donde se habían estado ocultando. En el transcurso del juicio, un testigo protegido aportó declaraciones que vinculan a los hermanos Morgado Herrera con actividades criminales más amplias, describiendo una organización que se dedicaba a perpetrar asaltos y atentados, bajo la cobertura de ser trabajadores de aplicaciones de domicilios.

Organización criminal

Esta revelación sugiere una organización criminal con operaciones extendidas, lo que añade complejidad al caso. La Fiscalía investiga los vínculos de los hermanos Morgado Herrera con otras actividades ilícitas y su posible pertenencia a una red criminal más amplia.

"Se calentó la vuelta", dijo uno de los hermanos Morgado Herrera tras el homicidio.

Por: Fabián Ramírez
Pulzo