Petro toma una decisión sorpresiva y despide a ocho escoltas de su equipo

El presidente Petro ha tomado la decisión de despedir a ocho escoltas de su esquema de protección. Esta decisión se produce después de que el director de la Unidad Nacional de Protección (UNP), Augusto Rodríguez, denunciara en el consejo de ministros la existencia de una investigación sobre irregularidades en la contratación de escoltas.

Los motivos del despido

Según fuentes cercanas a la presidencia, los escoltas fueron despedidos por no cumplir con los requisitos necesarios para formar parte del esquema de protección del presidente. Algunos de ellos habrían sido contratados sin contar con la experiencia o la formación adecuada, y otros habrían incurrido en irregularidades en el desempeño de sus funciones.

Críticas y malestar entre los escoltas

Los escoltas despedidos han expresado su malestar por la decisión tomada por el presidente. Aseguran que fueron despedidos injustamente y que no se les dio la oportunidad de defenderse de las acusaciones en su contra. Además, denuncian que la UNP habría actuado con favoritismo al contratar a escoltas afines al gobierno.

Pugnas internas y canibalismo

El despido de los escoltas ha puesto de manifiesto las pugnas internas que existen entre los miembros de la UNP y la Policía Nacional. Los escoltas de la UNP habrían desplazado a los policías del esquema de protección del presidente, lo que ha generado malestar y tensión entre ambos cuerpos.

Además, fuentes dentro de la presidencia han denunciado la existencia de un "canibalismo" entre los funcionarios de seguridad que protegen al mandatario y su familia. Algunos escoltas habrían aprovechado su posición para beneficio personal, desplazando a otros compañeros y creando un clima de desconfianza y competencia.

El futuro de la seguridad presidencial

El despido de los escoltas ha abierto un debate sobre el futuro de la seguridad presidencial. Algunos expertos consideran que es necesario reforzar el esquema de protección del presidente, mientras que otros abogan por una mayor transparencia y profesionalización en la selección y contratación de los escoltas.