Vecinos denuncian prostíbulo clandestino en Ciudad Bolívar

Vecinos del barrio Candelaria La Nueva, en la localidad de Ciudad Bolívar, sur de Bogotá, denuncian la presencia de una casa en la que se realizan actividades sexuales y consumo de sustancias ilícitas. La denuncia fue hecha pública por los vecinos, quienes aseguran que llevan cerca de tres años sufriendo con esta situación.

Una fachada engañosa

La vivienda en cuestión es una casa de tres pisos, con terraza y una fachada de baldosa que simula ladrillo. Dicha vivienda ha aparentado ser una casa común durante aproximadamente tres años, pero se cree que tras los portones color dorado se esconden actividades ilícitas que perturban la paz de los residentes de la zona. A simple vista, nadie sospecha de lo que allí ocurre, ya que se camuflan con la intención de actuar de manera clandestina y despistar a las autoridades.

Actividades sospechosas

A pesar de su fachada, los vecinos han notado una serie de actividades sospechosas, como música fuerte todos los días y la entrada y salida constante de personas. Esto los puso en alerta y dieron aviso a las autoridades. Una de las vecinas afectadas, quien prefiere mantener el anonimato, contó que una vez golpearon en su casa preguntando si ahí era el prostíbulo.

Las riñas, las personas que salen conduciendo vehículos bajo el estado de embriaguez, el consumo de sustancias ilícitas y el alto volumen de la música son parte del panorama que rodea a esta casa.

Investigación y operativos

Tras las denuncias de la ciudadanía y el trabajo de inteligencia de las autoridades, se logró establecer que los administradores de la vivienda habían dispuesto varias cámaras en la fachada, utilizaban el primer piso del lugar como bar para despistar y tenían campaneros que alertaban de la presencia de la Policía. En julio de este año se realizó un operativo en el que se impuso un comparendo y se suspendió la actividad económica por seis días, además se encontró a un menor de edad en el lugar. Sin embargo, una vez cumplidos los seis días, volvieron a funcionar como si nada.

Ante la falta de delitos en flagrancia, las autoridades decidieron realizar un segundo operativo. En la investigación se dieron cuenta de que un hombre parado a varios metros de la casa alertaba de lo que ocurría con un radio. Si pasaba una patrulla, le avisaba, por lo que las autoridades decidieron actuar primero de manera encubierta.

Segundo sello

El pasado 7 de agosto, las autoridades lograron un segundo sello de clausura del lugar después de entrar de civiles.

Una vez dentro, se dieron cuenta de que también se promocionaban en redes sociales, en las que se hacían llamar "mascotas.com". Durante el operativo se incautaron varias dosis de sustancias psicoactivas y una gran cantidad de preservativos.

Jairo Cárdenas, asesor de seguridad de la Alcaldía de Ciudad Bolívar, confirmó que hallaron papeletas con bazuco y cocaína, drogas que eran ofrecidas en el lugar a los clientes.

Víctimas sospechosas

En los videos que difundían en las redes sociales se veían mujeres jóvenes de las que se sospechaba podían ser menores de edad. Sin embargo, esto no se pudo establecer, ya que algunas de las personas halladas eran de nacionalidad extranjera, dificultando su identificación.

Procedimiento legal

El procedimiento en Colombia indica que si hay capturas de delitos en flagrancia y se logra adelantar una investigación que conlleve a un proceso de extinción de dominio o capturas de responsables de presuntos delitos, podría evitarse que abran de nuevo poco después del sellado. Sin embargo, a pesar de que se llevó a cabo este segundo cierre, hasta que no se adelante la investigación y se identifique la comisión de un delito mayor, el lugar puede volver a funcionar de manera clandestina.

Piden el cierre definitivo

"Queremos que lo acaben del todo, porque siempre siguen funcionando como si nada", denuncian los vecinos. El comandante de la Estación de Policía de Ciudad Bolívar, el coronel Germán Gómez, indicó que "a través de redes sociales se promocionan este tipo de actividades y se engaña a las personas haciéndolas creer que irán a lugares legalmente constituidos."

El oficial agregó que "lo que hemos evidenciado es que se usan casas de dos y tres pisos con bares que funcionan de forma clandestina y con habitaciones en los demás pisos sin ningún tipo de regulación ni verificación de autoridad sanitaria".

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