España acelera su inversión en defensa: Un impulso al gasto militar para 2025
España está intensificando sus esfuerzos para alcanzar el objetivo de la OTAN de invertir el 2% de su Producto Interno Bruto (PIB) en defensa, según un plan recientemente aprobado por el Consejo de Ministros. Este ambicioso plan, que se está remitiendo a la OTAN y la Unión Europea para su revisión, implica una inyección de 10.471 millones de euros en los presupuestos de defensa, elevando el gasto militar a 33.123 millones de euros para 2025. El gobierno de Pedro Sánchez asegura que este aumento se realizará sin comprometer el gasto social, el medio ambiente, ni aumentar impuestos, déficit o deuda pública.
¿De dónde provienen los fondos?
La financiación para este aumento significativo en el gasto militar provendrá de diversas fuentes. Una partida importante, 2.819,17 millones de euros, provendrá del Fondo de Liquidez Autonómica (FLA). Otras fuentes incluyen gastos asignados en los presupuestos prorrogados de 2023 (1.744,89 millones), la reorientación de fondos del Plan de Recuperación y Resiliencia de la UE (1.357 millones), reintegros y nuevos préstamos del Ministerio de Industria (1.680,83 millones), y el Fondo de Contingencia (1.395,10 millones).
Inversión en la industria nacional
El plan también contempla una transferencia de crédito al Ministerio de Industria para financiar proyectos tecnológicos relacionados con programas de defensa, buscando potenciar la base industrial nacional. Según Miguel González (2025) de El País, esta iniciativa tiene como objetivo «desarrollar grandes proyectos tecnológicos considerados de alto interés estratégico en áreas y tecnologías de gran eficiencia científico-técnica, cuya dimensión industrial obliga a movilizar una gran cantidad de recursos materiales y humanos altamente cualificados».
Pilares del plan de inversión
El plan se estructura en cinco pilares fundamentales:
- Mejora de las condiciones laborales de la tropa y marinería, así como la preparación y equipamiento de las Fuerzas Armadas (3.712,49 millones de euros).
- Desarrollo y adquisición de nuevas capacidades de telecomunicación y ciberseguridad (3.262,76 millones de euros).
- Fabricación y compra de nuevos equipos de defensa y disuasión (1.962 millones de euros).
- Refuerzo de las capacidades de las Fuerzas Armadas para apoyar la gestión de emergencias y desastres naturales (1.751,53 millones de euros).
- Mejora de las condiciones de seguridad de los militares españoles desplegados en misiones en el exterior (328,74 millones de euros).
Modernización y nuevos programas
Dentro de los programas de modernización, se incluyen la nueva radio táctica del Ejército de Tierra SCRT (350 millones), el sistema de mando y control MC3 (241 millones), los satélites espía Paz 2 (200 millones), y la modernización de las fragatas F-100 (225 millones). También se prevé la adquisición de nuevos equipos, como el sistema aéreo de combate de sexta generación FCAS (216 millones) y aviones anfibios de lucha contra incendios (661,39 millones).
Además, se destinarán fondos al servicio secreto CNI (482 millones) para fortalecer su área de ciberseguridad y ampliar su plantilla y presencia en el extranjero. También se invertirán 189 millones para mejorar las capacidades del Ministerio del Interior en áreas como ciberinteligencia.
Reacciones internacionales y el papel de la OTAN
El presidente Sánchez informó de este plan al secretario general de la OTAN, Mark Rutte, quien celebró el anuncio de alcanzar el 2% más rápidamente, enfatizando la necesidad de aumentar la inversión en defensa para construir una OTAN «más fuerte, más justa y más letal». La presión de la OTAN ha sido un factor decisivo para que España adelantara este objetivo.
Según El País (2025), España, después de los anuncios de Italia y Bélgica, se encontraba rezagada en alcanzar el objetivo fijado en la cumbre de Gales de 2014. Rutte había mencionado que España buscaba alcanzar el 2% en verano, lo que fue desmentido por La Moncloa. La próxima cumbre de la OTAN en La Haya podría fijar un nuevo objetivo de gasto militar, posiblemente superando el 3%.
Impacto económico y tecnológico
El Gobierno español estima que el 87% de la inversión se destinará a empresas españolas, lo que impulsará el PIB entre 0,4 y 0,7 puntos porcentuales, aumentará la I+D+I del Estado en un 18% y creará 96.000 empleos, de los cuales 36.000 serán directos y altamente cualificados.
Conclusión
España está tomando medidas concretas para fortalecer su capacidad de defensa y cumplir con los compromisos de la OTAN. Este aumento en el gasto militar no solo modernizará las Fuerzas Armadas y fortalecerá la industria nacional, sino que también busca mejorar las condiciones laborales de los militares y reforzar la seguridad del país en un contexto global cada vez más complejo.
