Pedro Sola y su Inesperado Deseo Post-Mortem

El reconocido conductor de 'Ventaneando', Pedro Sola, está generando controversia y sorpresa al revelar su peculiar deseo de ser sepultado en un lugar emblemático de México: el Palacio Nacional. Esta declaración, realizada durante una emisión reciente del programa, ha desatado una ola de comentarios y especulaciones sobre las razones detrás de esta inusual petición.

Un Deseo con Historia

Sola, conocido cariñosamente como 'Tío Peter' por sus seguidores, explicó que su conexión con el Palacio Nacional se remonta a sus años como economista, cuando laboró en la Secretaría de Hacienda. «Yo quiero que me sepulten abajo en Palacio Nacional, abajo, ahí, ya saben dónde, yo ahí trabajé hace muchos años», declaró Sola, según lo reportado por El Financiero (Redacción, 2025). Aunque no profundizó en los detalles de sus funciones en aquel entonces, su experiencia en el recinto parece haber dejado una huella imborrable.

¿Palacio Nacional o un Crucero en la CDMX?

En un tono que mezclaba seriedad y humor, Sola incluso consideró una alternativa menos solemne: ser sepultado en un crucero cercano a los foros de grabación de TV Azteca en la Ciudad de México. Esta idea, aunque presentada como una broma, revela una faceta más desenfadada del conductor, quien no teme romper con las convenciones y expresar sus deseos más extravagantes.

Según El Financiero (Redacción, 2025):

«¿Que me sepulten en el jardín de presidencia? No, mejor en el crucero, en una esquina aquí cerca, pero que pongan una grabación sin fin donde se escuche mi…»

Los Años de Pedro Sola como Economista

Antes de convertirse en una figura prominente de la televisión, Pedro Sola construyó una sólida carrera como economista. Desde 1968 hasta 1976, trabajó en la Secretaría de Hacienda, donde desempeñó diversas funciones, incluyendo la traducción de leyes fiscales alemanas y francesas. Este trabajo, según explicó en una entrevista con Pati Chapoy, sentó las bases para el estudio del Impuesto al Valor Agregado (IVA) en México.

Sola recordó con orgullo su paso por la Secretaría de Hacienda, destacando que ascendió en la jerarquía gracias a su esfuerzo y dedicación. Sin embargo, su trayectoria en la administración pública no estuvo exenta de desafíos. Según relató, una jefa lo hostigaba por no utilizar la computadora, una situación que finalmente lo llevó a renunciar.

Compañero de Generación de Carlos Salinas de Gortari

La vida de Pedro Sola también estuvo marcada por su coincidencia con el expresidente Carlos Salinas de Gortari en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). Ambos ingresaron a la facultad de Economía en 1965, aunque sus caminos tomaron rumbos distintos. Mientras Salinas de Gortari se adentraba en la política, Sola se enfocaba en su carrera como economista.

«En el mismo año que entré yo, en 1965, Carlos Salinas de Gortari también es de esa generación, él se sentaba allá y yo acá; él con un grupo que ya empezaba en la cuestión política, su cuñado Ruiz Massieu, que mataron horrible, pero él estudiaba leyes, todo un grupo de muchachos», detalló Sola a Pati Chapoy.

Reacciones y Reflexiones

La revelación del deseo de Pedro Sola ha generado diversas reacciones en el público y en los medios de comunicación. Algunos lo ven como una excentricidad propia de su personalidad, mientras que otros lo interpretan como un gesto de rebeldía y desafío a las convenciones sociales. Independientemente de la interpretación, lo cierto es que la petición de Sola ha logrado captar la atención y generar debate sobre la muerte, el legado y el significado de los espacios públicos.

La noticia, divulgada por El Financiero (Redacción, 2025), pone de manifiesto la capacidad de Pedro Sola para generar conversación y mantener su relevancia en el mundo del entretenimiento, incluso al abordar temas tan delicados como la muerte. Su deseo, ya sea cumplido o no, seguramente quedará grabado en la memoria colectiva como una anécdota más de la vida de este singular personaje.

El Legado de un Economista Convertido en Icono de la Televisión

La trayectoria de Pedro Sola es un testimonio de la capacidad de reinventarse y encontrar el éxito en diferentes ámbitos. Desde sus inicios como economista en la Secretaría de Hacienda hasta su consolidación como uno de los conductores más queridos de la televisión mexicana, Sola ha demostrado su versatilidad y su talento para conectar con el público. Su historia es un ejemplo de que nunca es tarde para perseguir los sueños y dejar una huella imborrable en el mundo.

Mientras tanto, el público está a la expectativa de saber si el deseo de Pedro Sola se hará realidad. ¿Será sepultado en el Palacio Nacional, junto a los héroes de la patria? ¿O descansará en un crucero de la Ciudad de México, rodeado de los sonidos de la televisión? Solo el tiempo dirá cuál será el destino final de este personaje tan peculiar.