Viviendo sin lo básico: La lucha por un baño digno en Argentina
En Argentina, la problemática del acceso a sanitarios dignos sigue siendo una realidad apremiante para millones de personas. Mientras la vida continúa, organizaciones como Módulo Sanitario están interviniendo para brindar soluciones concretas en comunidades vulnerables. Este esfuerzo colectivo no solo transforma espacios físicos, sino que también impacta profundamente en la dignidad y la salud de las personas.
La historia de Benji: Un baño que transforma vidas
Benji, con apenas dos años, está descubriendo el significado de tener un baño propio. Lava sus manos con autonomía, explora el inodoro y disfruta de un espacio que antes era un sueño lejano. Según Jazmín Bazán, periodista de Clarín, antes de que su familia contactara a Módulo Sanitario, Benji y su madre debían correr bajo la lluvia hasta la casa de un tío para acceder a un baño precario (Clarín, s.f.).
Ana y Pablo, los padres de Benji, se mudaron a Ingeniero Allan, en Florencio Varela, donde la carencia de agua potable y cloacas es la norma. La contaminación del arroyo Las Conchitas agrava aún más la situación, exponiendo a los residentes a riesgos sanitarios constantes.
Módulo Sanitario: Una iniciativa que construye dignidad
Frente a esta cruda realidad, Módulo Sanitario, una ONG fundada por seis amigos, está trabajando incansablemente para abordar la falta de acceso a baños dignos. Desde 2015, el equipo, compuesto por ingenieros, arquitectos y teólogos, ha construido más de 1.850 baños, contando con el apoyo de empresas como Ferrum.
Tomás Sicouly, cofundador e ingeniero industrial de Módulo Sanitario, destaca la importancia de los hábitos de higiene en los primeros años de vida. «Siempre hablábamos de la importancia del baño en los primeros años de vida», recuerda Sicouly. «Sabíamos que los hábitos de higiene potencian la nutrición, y permiten que los problemas de nutrición se gestionen bien» (Clarín, s.f.).
Censos sanitarios: Un diagnóstico preciso
Módulo Sanitario complementa los datos del INDEC y la Encuesta Permanente de Hogares con sus propios censos sanitarios. Estos censos implican visitas casa por casa para evaluar la disponibilidad de agua, la existencia de bacha y las condiciones de higiene. Los voluntarios preguntan sobre la frecuencia de duchas, lavado de manos y cepillado de dientes.
«Para mucha gente, bañarse es un infierno: tienen que exponerse al frío, sin privacidad ni condiciones mínimas de limpieza. Eso es lo que queremos cambiar», explican los voluntarios de la organización (Clarín, s.f.).
Un fin de semana de construcción: Trabajo en equipo
La construcción de cada baño involucra a un equipo de siete personas, combinando experiencia y voluntariado. En un solo fin de semana, se pueden construir hasta 25 baños, con la participación de entre 160 y 180 voluntarios. Sicouly subraya que esta experiencia ofrece a muchos jóvenes una nueva perspectiva vocacional.
«Recibimos colegios, adolescentes, personas que están decidiendo qué hacer con su vida. Esta experiencia les da otra mirada, otra pregunta vocacional», explica Sicouly (Clarín, s.f.).
Participación comunitaria: Un esfuerzo colectivo
Las familias beneficiadas participan activamente en el proceso, cocinando, limpiando y asistiendo a talleres de higiene. Se les solicita un aporte del 10% del valor del baño, fomentando un sentido de propiedad y orgullo. La historia de una mujer en San Luis, que vendió empanadas para cumplir con su parte, ejemplifica este compromiso.
El valor de lo propio: Historias de transformación
Rocío, otra vecina de Ingeniero Allan, describe la construcción de su baño como una experiencia hermosa. Yesica González, de Cuartel V en Moreno, aún espera su baño, imaginando el día en que sus hijas puedan bañarse dignamente y lavarse los dientes antes de ir a la escuela.
Desafíos y políticas públicas: Una mirada integral
Nicolás Ferme, coordinador de Estado y Gobierno de CIPPEC, señala que el crecimiento desordenado de las ciudades argentinas agrava la desigualdad territorial. Subraya la necesidad de repensar las políticas públicas, priorizando la inversión en hábitat y la mejora de las condiciones sanitarias en viviendas existentes.
Según Fundación Aguas, más de 7 millones de personas en Argentina no tienen acceso a agua potable. Víctor Jordán, responsable de Proyectos, destaca la importancia de la educación en derechos para garantizar el acceso a agua de calidad, cercana y segura.
UNICEF advierte que la falta de instalaciones sanitarias adecuadas en escuelas y hogares contribuye al ausentismo de niñas durante su menstruación, perpetuando desigualdades educativas.
Un futuro con dignidad
La historia de Ana y Benji es un testimonio del impacto transformador de un baño digno. Después de años de dificultades y enfermedades relacionadas con la falta de higiene, hoy Benji puede cantar en la ducha y Ana espera a su segundo hijo con mayor tranquilidad. En un barrio donde la carencia es común, este logro representa un paso significativo hacia un futuro con dignidad y oportunidades.